Terapia para traumas y TEPT

No tiene por qué sufrir traumas y TEPT

Si está leyendo esto, es posible que lleve años viviendo con los efectos negativos del trauma. Sus experiencias pueden haberle llevado a creer que las cosas nunca mejorarán. Puede que ni siquiera reconozca que muchos de sus síntomas están causados por respuestas traumáticas. Es posible que haya probado la terapia en el pasado, pero puede que no le haya servido de nada si su consejero no estaba informado sobre el trauma. La idea de pedir ayuda puede asustar mucho cuando se padece TEPT, y evitarla puede parecer mucho más seguro. La verdad es que las personas que intentan evitar sus historias traumáticas suelen pasar mucho tiempo en el ciclo de la rumiación y la supresión, mientras siguen sufriendo numerosos síntomas físicos y emocionales angustiosos. 

Un terapeuta experto en traumas puede ayudar

Si usted está listo para comenzar a lidiar con el pasado y recuperar su futuro, la elección de un consejero de trauma informado que utiliza tratamientos basados en la evidencia es un gran lugar para empezar. Los consejeros informados por el trauma están capacitados para ayudarle a establecer objetivos de tratamiento claros, trabajar con usted a un ritmo que sea adecuado para usted y ayudarle a desarrollar estrategias para el manejo de los síntomas y la seguridad durante el curso del tratamiento. Puede que se sorprenda gratamente de lo mucho mejor que puede sentirse.

Tipos comunes de trauma agudo que causan TEPT: 

A menudo, las personas que sufren este tipo de traumas agudos experimentan síntomas perturbadores. Estos síntomas de TEPT pueden incluir: shock, ira, miedo intenso, evitación de pensamientos relacionados con lo sucedido, pesadillas, pensamientos intrusivos, ataques de pánico y alteración aguda de sus hábitos alimentarios o del ciclo del sueño. La alteración puede producirse rápidamente después del suceso o incluso más tarde, lo que puede resultar muy confuso. Incluso en el caso de un trauma agudo, suele haber un retraso en la búsqueda de servicios de asesoramiento.

Hay diferencias entre el trauma agudo y el trauma crónico

Hay otros tipos de trauma que pueden causar TEPT y que pueden ser inesperados. A veces estos problemas son más generalizados y se producen lentamente a lo largo de meses o años. Las personas que sufren este tipo de traumas pueden no ser plenamente conscientes de que padecen TEPT, o pueden pensar que lo que les ha ocurrido no es "lo bastante grave" como para justificar un diagnóstico de TEPT.

Los amigos y familiares bienintencionados no siempre son útiles

El trauma crónico puede hacer que una persona se vuelva contra sí misma y minimice sus propias experiencias y el impacto negativo que éstas han tenido en ella, lo que conduce a un aumento de los sentimientos de autodesprecio. Muchas personas que no están informadas sobre el trauma no comprenden los efectos del trauma crónico. Incluso familiares y amigos bienintencionados pueden decir a las personas que sufren un trauma crónico que tienen que "dejarlo pasar", "seguir adelante" o "superarlo". Las personas que han sufrido un trauma crónico también pueden experimentar síntomas físicos a largo plazo, como dolores de cabeza, tensión muscular, dificultad para dormir y malestar gastrointestinal. Pueden pasar años antes de que las personas comprendan que el trauma crónico es la raíz de sus síntomas y encuentren un consejero para el TEPT.

Algunos tipos comunes de trauma crónico incluyen: 

• Trauma de apego (relaciones insanas con los padres o cuidadores) 

• Trauma relacional (relaciones insanas con hermanos, amigos o parejas románticas).

• Trauma racial 

• Padecer una enfermedad crónica o sufrir un trastorno médico grave que cambie su vida Trauma laboral (ser explotado por un empleador o enfrentarse a políticas tóxicas en la oficina) Pérdida de empleo 

• Acoso escolar 

• Pérdida o duelo traumático 

• Daño moral 

¿Todos los traumas conducen al TEPT? ¿Tengo que tener un TEPT para recibir ayuda?

No todas las personas que experimentan traumas como los enumerados anteriormente acaban desarrollando un TEPT. Sin embargo, no es una debilidad ni un fracaso personal que alguien desarrolle un TEPT. A veces, el efecto combinado de múltiples tipos de trauma a lo largo del tiempo acaba pasando factura y una persona puede encontrarse reaccionando de formas que no esperaba. Los terapeutas informados por el trauma saben que es inútil comparar distintos tipos de trauma o decidir qué experiencia fue "suficientemente mala" y cuál no. Si lo que pasó es un problema para ti y sigues experimentando síntomas relacionados con lo que pasó, entonces es un problema. No necesitas justificar tu pasado o tus sentimientos. No importa cuánto tiempo hace que ocurrió tu trauma, o qué pasó. A veces el tiempo cura, y a veces no. 

"Momento difícil" vs. Trauma vs. TEPT: ¿Cómo saberlo?

A menudo, la diferencia reveladora entre tener una mala experiencia y ser capaz de seguir adelante con la vida o tener una mala experiencia y desarrollar un trastorno de estrés postraumático es un cambio en la forma en que la persona se ve a sí misma después de una experiencia traumática. Una característica que define el TEPT es un cambio en la relación del individuo consigo mismo. Si esto le suena a usted, la terapia con un consejero informado sobre el trauma puede cambiarle la vida.

"Estoy dañado", "no puedo confiar en los demás", "soy débil", "soy un fracaso" o "no puedo confiar en mí mismo".

Los terapeutas informados por el trauma consideran que estas formas negativas de pensar se dan especialmente con el trauma complejo. Trauma complejo es como lo llamamos cuando se han producido diferentes tipos de trauma a lo largo de los años. Estas experiencias traumáticas se agravan con el tiempo. Las personas pueden acabar creyendo realmente cosas negativas sobre sí mismas. Incluso cuando hay muchas pruebas claras en contra de estas creencias negativas. Los hechos objetivos pueden demostrar que la persona afectada tiene en realidad muchos puntos fuertes y cualidades positivas. Pero, a veces, los traumas complejos impiden ver la verdad.

Por qué buscar un terapeuta formado en el trauma

Esto nos lleva a otra cuestión que los terapeutas informados por el trauma reconocen con frecuencia en sus clientes: una discrepancia entre la inteligencia, el empuje, la ética laboral, las habilidades y el carácter observados de un cliente frente a cómo están funcionando en su vida laboral, social y de pareja. Entre las respuestas traumáticas más comunes se encuentran la adicción al trabajo, no sentirse nunca lo suficientemente bien, tener problemas económicos o tener periodos en los que funciona bien pero luego se agota rápidamente. También reconocemos que los comportamientos autodestructivos de los clientes son a menudo el resultado de una respuesta traumática. Estos comportamientos pueden incluir el abuso de sustancias, la participación en habilidades de afrontamiento poco saludables, y otros comportamientos tales como abandonar la escuela, aceptar un trabajo por debajo de sus capacidades, perder amistades y relaciones románticas debido a arrebatos o retraimiento social, y la lucha por mantener un peso saludable o un ciclo de sueño saludable. 

Terapia del trauma y tratamiento del TEPT que funciona

Un tratamiento eficaz del trauma no consiste únicamente en superar las experiencias traumáticas, aunque el objetivo del tratamiento a largo plazo es ayudar a la persona a superar lo sucedido. El tratamiento del trauma no borra los recuerdos de una persona. Por el contrario, el tratamiento del trauma suele implicar el reconocimiento de lo sucedido, el desentrañamiento de las múltiples capas en las que los acontecimientos cambiaron sus vidas y la ayuda a la persona a tomar conciencia de cómo se siente física y emocionalmente cuando piensa en lo ocurrido. Es a través de este proceso que los eventos traumáticos pueden ser verdaderamente tratados, y el individuo puede dejar de lado el miedo, la vergüenza y la culpa. Puede empezar a verse a sí mismo desde una perspectiva positiva, volver a conectar con sus puntos fuertes y recuperar la esperanza.

Recupera la esperanza y a ti mismo

El objetivo final del tratamiento de la terapia traumatológica es ayudar a la persona a recuperar su sentido de sí misma, a ser capaz de pensar en lo sucedido sin sentir la necesidad de evitarlo/adormecerse, a no tener una reacción emocional excesiva cuando piensa en lo sucedido y a dejar de sentirse provocada por experiencias similares en el momento presente. Este proceso puede avanzar rápida o lentamente, en función de las necesidades y preferencias de cada persona. 

Vive una vida libre de las cargas de tu pasado

La búsqueda de un terapeuta especializado en traumas puede resultar abrumadora e incluso dar miedo. Pero vale la pena correr el riesgo de abrirse a lo sucedido. Puede empezar a recibir el apoyo necesario para procesar las emociones atascadas de una forma nueva. Con la terapia traumatológica, las personas que sufren tras sucesos traumáticos pueden ver sus vidas transformadas. Después de la terapia traumatológica y el tratamiento del TEPT, puede sentir una mayor motivación, una mayor capacidad para establecer límites con los demás y dedicarse al autocuidado, y una disminución de los síntomas fisiológicos relacionados con el estrés. ¿Qué te está frenando?